Gabriela Orellano, estudiante de Historia de la ULA, formalizó una entrevista con Globovisión y comenta lo que ha sido la huelga de los estudiantes frente al Pnud. Asegura que se manifiestan porque al Gobierno le molesta el ruido que hacen los estudiantes.
Luego de haberse cumplido 29 días de las protestas que comenzaron el pasado 23 de febrero, la vocera de los estudiantes asegura que sus peticiones siguen siendo justas, y se respaldan en el temor de que “el Gobierno trate de cerrar la fábrica de sueños”.
Su balance es que el movimiento universitario está unificado en todos sus sectores: “hemos demostrado con hechos, no con palabras, que nuestra dignidad no es negociable y que estamos firmes en nuestras posturas, a pesar de las consecuencias que esto pueda traer”.
Sobre la credibilidad que tiene el sector estudiantil, asegura que la transparencia caracteriza a los estudiantes que exigen justas reivindicaciones sociales. Ese es el mensaje que envían los jóvenes, y por eso son reconocidos y confían en ellos.
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